Siete días con mi superestrella favorita. Capitulo 29.

Siete días con mi superestrella favorita.

Capitulo 29: Despedidas y vacaciones.

Andrea volvió y me dijo que el perrito y sus cosas estaban en mi casa. 

-Vamos a por las maletas. Isa tu no puedes con ninguna.-Le dijo Ross a mi hermana.

-Tengo una idea, ve abriendo la puerta cuando las bajemos.-Le dije para mantenerla ocupada.

-Está bien.-Dijo ella 

Fuimos bajando las maletas. Ya lo único que quedaba era la caja del perro y el perro. Ross se escondió. 

-Isa necesito que le lleves estas dos tarjetas a recepción y esta a mi jefe.-Le dije para que ella se entretuviera.

Mi hermana se alejó corriendo. 

-¡Corre montante en el coche ahora!- Le dijo Andrea. Ross metió el perro en el transportin y se metió en el coche. 

-Ya estoy aquí. - dijo mi hermana.

-Venga móntate en el coche. Ross ya está dentro.-Le dijo Andrea.

Andrea iba delante con Ross y mi hermana y yo detrás. Llegamos al aeropuerto y Andrea nos dijo: 

-Tú y Ross coged algunas maletas y iros para allá. Yo y Isabel vamos a buscar aparcamiento. 

-¿Por que yo me quedo contigo?-Se quejó mi hermana.

-Porque cada vez que vienes conmigo encuentro pronto un sitio. 

-Ahh vale entonces iré contigo. 

Yo salí antes que Ross y le cogí el perro y la puse un trapo por encima. Cogimos todas sus maletas. 

-La única maleta que queda es la mía, así que no te la lleves. - Le dije a Andrea.

- Vale, luego nos vemos. 

Ross y yo fuimos a las ventanillas de las azafatas. 

-Pasen por aquí.-Dijeron estas muy sonrientes.

-Estamos esperando a una mujer y a una niña que viene con nosotros.-Les dijo Ross.

- Ahora las dejaremos pasar. Vamos a facturar las maletas antes de que vengan. 

-Si, buena idea.-Dijo Ross

-No se preocupen. De eso se encargan ellos, a ver déjeme ver los papeles del perrito. 

-Aquí los tiene. 

-Muy bien. Pues su vuelo sale en media hora. 

-¿Media hora?-Ross sonaba triste de nuevo.

-Si, se ha retrasado un poco. 

-Pues entonces habrá que esperar un poco más. - Le dije para intentar animarle.

-Podéis pasar a la sala de espera que le tienen reservada señor Lynch.

-Vamos anda, levanta esa cara. -Le dije sin resultado.

Pasamos a una enorme sala muy bonita con unas vistas muy bonitas y se podía ver los aviones despegar. Había uno preparándose para hacerlo.

- Ana, ¿puedo pedirte algo?

-Claro, dime- Ross parecía a punto de llorar.

-¡PEGAME!

-¿QUE? ¿POR QUE? ¿TE HAS VUELTO LOCO?

-¡SI ME PEGAS ME ENFADARÉ CONTIGO Y NO PUEDO ECHAR DE MENOS A ALGUIEN CON QUIEN ME ENFADO!

-Ross, no voy a pegarte.- *Ohh no, aquí vienen*

-¡NECESITO QUE LO HAGAS!

-NO, entonces no querrás volver.- Solté toda la rabia contenida.

Esto no era bueno, si le pegaba el me odiaría. No podía permitir eso, le arrebataría ese buen humor que siempre tenía. Iba a estar mal conmigo y no quería eso. La tristeza se apoderaba de mi mente. Todo eran cosas malas. Cosas que quería decirle, gritarle y chillarle. El era el único que me había visto correr, el único que siempre se metía conmigo para que yo le contestara. En una semana habíamos pasado por muchas cosas. Ahora el se iría y lo olvidaría todo. Volvería a Los Ángeles y seguiría con su vida normal, dejando esta semana en algún rincón perdido de su memoria. Quería pegarle, si. Por haberlo conocido, por haberme hecho reír, llorar, por pelear conmigo y por un millón de cosas más. Era el único... Todo se destrozaría si el volvía y tenía que hacerlo. Todo se reunía en mi mente y el me miraba ya con lagrimas en sus ojos. Ahora era él el que lloraba. Se limpió los ojos y me dio un abrazo.

- ¡TONTO! - Le grité golpeando con mis puños sus hombros.

Lo único que hice fue empeorarlo todo. El empezó a llorar más fuerte. El abrazo fue mas fuerte. Me solté y me dirigí a la ventana. Una azafata entró y le dijo a Ross que su avión se había retrasado aun mas por fallos técnicos. En total sería una hora y media más mientra arreglaban las averías. Me tranquilicé y vi otro avión listo para despegar.

-¿Ves ese avión que se va? -Le dije a Ross con las lágrimas a punto de salir de nuevo.

-Si, ¿por que?- dijo 

-Ya tienes lo que querías, te he insultado y te he pegado. Ahora adelante, enfádate conmigo, súbete a un avión como ese y olvida todo esto. Ha estado bien ser normal por una semana, pero eres famoso y debes volver a tus focos, micrófonos y cámaras. Adelante olvida todo esto, olvídame a mí y esta semana. No significan nada para ti. Lo sé, lo veo en tus ojos.

-¿Sabes que es lo peor?-dijo Ross.

-¿Que?

-Que a pesar de ser tan dura conmigo no puedo evitarlo. No puedo enfadarme contigo. Y ¿sabes algo más? Si que soy famoso, y ¿que? Nunca voy a olvidar a mi niñera, ¿me has oído? NUNCA. N. U. N. C. A. Y grabatelo bien en la cabeza por que al igual que ese avión que se ha ido yo volveré. No voy a dejarte en un rincón de mi memoria. Sabes que lo que digo es cierto. Tu estuviste ahí cuando me encontraba hecho polvo y tu me ayudaste a dormir a las tantas de la mañana cuando, admitelo, me querías dar con la puerta en las narices. ¿Para que quería esas fotos de cuando fuimos a correr? Por que con ellas intenté parar el tiempo y para mí lo hizo. Te corretee por toda tu habitación solo por diversión y ¿crees que voy a olvidar tan fácil que me gastaste dos bromas? No, se que te la devolveré en cuanto pueda. Tampoco voy a olvidar esa noche. Y mucho menos la cara de tu vecino. Somos un gran equipo y si eres mi niñera sabrás que volveré. Todavía soy menor de edad.

-Si, claro. Con 25 años y eres menor de edad.  -No pude evitar reírme. Este era el Ross de siempre.

-Antes de irme me tienes que dar la carta. Eso tampoco se me ha olvidado.

-Cuando tu me digas lo de la otra noche. 

-Entonces haremos una cosa. Yo te lo cuento por teléfono y tu me la lees por teléfono también. -dijo un poco más calmado.

-Me parece bien. 

-¿La has traído? 

-Si, aquí la tengo.-Se la enseñé y la guardé en el bolsillo de atrás. 

-¿Donde estarán estas dos?- Me asomé y las vi discutiendo con la azafata. 

-¿Hay algún problema? -le dije a la azafata. Afortunadamente ya habíamos parado de llorar hacía ya rato.

-Si, no nos deja pasar. 

-¿Vienen con ustedes? -dijo la azafata haciéndose la sorprendida.

-Si, que pasen. Parece que no oyen al pasajero. Les dijimos que las dejaran pasar. 

-Perdone no les oímos. 

-Pues ya lo saben. Intente que su argumento sea mejor para la próxima por que fue usted la que le dijo al pasajero que las dejarían pasar. Intente que esto no se repita o me veré obligada a ponerles una demanda además de una reclamación y la tramitaré lo antes posible, así que, que no se repita. 

-¿Y tu eres la novata?- La voz de Ross resonó por detrás de mí. 

-Pues si.-le respondí.

-Pues vaya con la novata. 

-Ana nunca ha tolerado las injusticias y Ross tu vuelo se te escapa. -dijo Andrea.

-Huy me tengo que despedir. 

Ross abrazó a mi hermana. 

-Adiós pequeña Isa y sigue así. 
Adiós Andrea, le hablaré de ti a Riker. 
Adiós niñera, luego te llamo. 

Me dio un abrazo y salió corriendo. Salimos a los ventanales para ver como el avión despegaba y desaparecía en el cielo. Volvimos al hotel y me llegue a la oficina del jefe y pasé después de Andrea. 

-El señor Lynch ya ha cogido su vuelo. 

-Mire Ana creo que ha hecho un gran trabajo. Sientese. Creo que le daré una semana de vacaciones a elegir fecha. 

-Ohh muchas gracias. 

-Espere, todavía no he terminado. 

-¿No? 

-No, me andaré sin rodeos. Usted se merece una subida del sueldo. El señor Lynch dice que volverá por aquí y todo gracias a usted. También ha pasado una semana y nadie se enteró de donde estaba. He estado siguiendo de cerca a sus hermanos y amigos por twitter, no sabían donde se encontraba. 

-La verdad es que Andrea me ayudó con eso. Ya he hablado con Andrea y me ha pedido ya las vacaciones. 

-¿Para cuando? 

-Dentro de una semana. Ella las ha cogido por usted para entonces también. 

-Pues no se hable más. 

-Esta será una semana normal. Ya puede irse. 

Salí del despacho dando saltos. 

-Voy ahora a por la moto.- le dije a Andrea. 

-Llame a los del taller ayer y me dijeron que la moto no tiene arreglo, no te lo quise decir antes por no aguarte la fiesta. 

-Me dijeron que encontraron algo que había que arreglar, pero no me dijeron el qué. 

-Pues a mí me dijeron que no tenia arreglo y que menos mal que lo vieron. Si no la hubieras llevado te podías haber hecho daño. 

-Pues bueno, menos mal que tengo la otra moto. Me la llevo a mi casa, sigueme por la carretera y luego vamos a comer. Mi hermana elige el sitio.

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Hey lectoras!! Aquí el penúltimo capitulo de la temporada. Un poco triste, pero es lo que tienen las despedidas. 

Awwwwwww que bonito todo. :") He intentado que no sea muy triste la despedida. No quiero que lloréis.

Mañana el último capitulo y el sábado el adelanto de la segunda temporada.

Besitos a las R5ers, Rossers y a la R5Family. 

R5er 4ver!!