Siete días con mi superestrella favorita. Capitulo 26.

Siete días con mi superestrella favorita. 

Capitulo 26: Tus ojos te delatan.

En el capitulo anterior. . . 

-Ana, quiero darte algo. 

-¿A mi? 

-Si, a tí. Por aguantarme. 

-Ehh soy tu niñera, ese es mi trabajo. 

-Ya, pero ¿sabes? No hay mucha gente que aguante como tú. Tú me has aguantado cuando te desperté en medio de la noche y me tratarte muy bien. Incluso mis hermanos me hubieran mandado de cabeza al infierno. Tú me has aguantado cuando te hice mis bromas. Tú me has aguantado cuando estaba mal y llorando. Tú me has aguantado mi ego. Tú me has aguantado cuando nadie más lo habría hecho. Solo tú.

- ¿Y qué me querías dar? 

-Es mi colgante del grupo. 

-Ross no tienes por que hacerlo. Yo tengo el mío.-Yo sabía lo importante que era ese colgante para él. El hecho de que me lo diera era algo muy importante.

-Pero es para que tengas el mío.

Ross me lo colocó alrededor del cuello.

Capitulo 26. . . 

-Gracias.- Le abracé. -¿Sabes?, te voy a echar de menos rubito. 

-Y yo a ti Ana. 

-Ya sabes, cada vez que te pelees con alguno de tus hermanos aquí estaré.- Dije evitando llorar.

-Lo tendré en cuenta. -dijo el riendo.

-Bueno, todavía es jueves. Vamos a cenar. Después iremos a dar una vuelta con la moto, si quieres. 

-Claro que quiero. 

-Pues primero la cena. 

Bajamos a la cafetería. Nancy nos había hecho rellenos para sándwich. Yo cogí uno de palitos de cangrejo y Ross cogió uno de atún. Los envolvimos y cogimos unas latas de refresco. 

-Ponte algo vaquero para la moto. Aquí tienes el casco. 

-¡Vayámonos ya!- Dijo Ross impaciente

-¿A donde vamos?-Le dije para que se relaje un poco.

-A tu sitio favorito. 

-Pues allá vamos. 

Di un pequeño rodeo por las calles más vacías. Lo ultimo que quería era que lo reconocieran el día antes de irse. Al llegar estaba oscuro. La noche era fresca a pesar de ser verano. Corría una brisa muy agradable. Las estrellas brillaban más que nunca. Ross y yo nos sentamos en el suelo.

-Espera que pongo los faros. 

-¡No!, sabrán que hay alguien y nos descubrirán. Me valen las luces de la autopista. 

-Está bien. 

Comimos y hablamos. 

-¿Tus hermanos también estudiaron español? 

-No, solo yo. Ellos solo saben unas palabras. 

-¿Por que estudiaste español? 

-No sé. Supongo que porque me llamaba la atención. Oye llevas todo el rato haciéndome preguntas. ¿Te has planteado ser periodista? 

-Pues aunque no te lo creas esa era mi segunda opción si no tenia nota para derecho. 

-Quizá algún día me hagas alguna entrevista. 

-No creo. Sería muy raro. 

-¿El qué?- Me pregunto Ross curioso.

-Preguntarte cosas que ya sé. 

-¿Y qué pasa si no lo sabes? 

-Te las preguntaría y sabría si es verdad por tus ojos. 

-¿Por qué? ¿Tanto te fías de ellos? Es que tengo unos ojos muy bonitos.

-No. Más quisieras. No sé, pero cuando dices algo que no es del todo cierto tus ojos cambian. Así supe que me contarías lo de la otra noche. Cuando dijiste que nunca me lo contarías algo en tus ojos cambió. 

-Vaya hombre. Pero admite que tengo unos ojos muy bonitos. Seguro que con todo eso de leerlos no sabes ni de que color son.

-Cafés claro y cambian a oscuro cuando mientes o dices la verdad a medias. Apuesto a que no sabes de que color son los míos.- Cerré los ojos para que no los viera.

-Tus ojos son (tu color de ojos) y se vuelven más caros cuando estás alegre.

-Al menos los míos no me delatan cuando miento. (xD uhh xD)

-Eso es algo malo.

-Si... tus ojos te delatan. 

-Menos mal que tu no te vienes conmigo. A mi madre le gustaría saber esas cosas. 

-¿Ella no lo sabe? 

-No, creo que no. - dijo demasiado seguro.

-Pues intenta no mirarla a los ojos. Las madres siempre saben esas cosas. -Le dije para quitarle esa seguridad.

-¿Como lo sabes? 

-No lo sé. Pero me doy cuenta de pequeños detalles, por eso cuando era pequeña intentaba suprimir esos gestos que haces cuando mientes. 

-Pues no te creas que lo has conseguido. 

-¿No lo he conseguido? 

-No, por ejemplo, cuando me gastaste la broma del teléfono. 

-¿Que es lo que hice? 

-Tus ojos eran alegres. Te lo dije antes. Pensé que sería porque me viste. 

-Ja ja muy gracioso. Para la próxima eso estará corregido. 

-Espero que sea pronto para ver si es verdad. Ahora me toca a mi preguntarte. Pero mírame a los ojos. 

-Está bien.- Me senté de frente a el para mirarle a los ojos.

-¿Por qué te gustaba Abraham? 

-¿En serio? - la pregunta era directa.

-¡Responde!- Dijo Ross intentando parecer serio.

-Ok, a sus órdenes mi comandante. -Dije sin parar de reír.

-Deja ya las tonterías y contesta. - dijo el riendo también. 

-Verás, empecé el instituto y lo vi, no estaba en mi clase pero era de mi edad. Era el más alto, el más gracioso, sacaba buenas notas y todas esas cosas que por fuera se ven tan bien. Al año siguiente cayó en mi clase y yo también sacaba buenas notas. Empezó a picarse con las notas y hacía todo lo posible para que nadie sacara más nota que él. Incluso llegó a decirme que las chicas estamos hechas para limpiar escaleras y no para estudiar. Ahí comprendí que era un imbécil y todo se centró en sacar más nota que el. 

-¿Lo conseguiste? 

-Claro, siempre consigo lo que quiero.- le guiñé el ojo.

-Vaya ojo que tienes.-Dijo con burla.

-Digamos que por eso no me fío de cualquiera y supongo que por eso no tengo novio. 

-¿Que pensaría tu "querido" vecino Abraham si te plantas con un desconocido en tu casa? 

-No lo sé. -La verdad nunca le hacia mucho caso.

-Voy a hacerte un favor y te acompañaré a tu casa. 

-¿A mí? No necesito demostrarle nada a nadie, además no tengo las llaves. Las tiene Andrea. Aunque... -Me plantee la ocasión como una oportunidad de pasarlo bien.

-¿Aunque...?-Ross me veía ya las intenciones.

-El tiene una copia de mis llaves y yo unas de las suyas. Por si le pasan algo a las mías. Por si se me "pierden". Nancy me había dicho que me relajara, pues vamos a reírnos un rato. No lo pensé mucho. Con Ross nunca pensaba nada. Solo vivir el presente y con eso ya todo lo demás sobraba.

-Uhh, chica mala. Me gusta. Vamos a amargarle el rato. -Me dijo Ross subiéndose a la moto.

-Venga, vale.- Dije yo montándome también.

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Bueno, aquí tenéis un capitulo cortito. Espero que os guste. A mi me gusta.

Solo quedan cuatro capítulos para que la temporada termine. 

¿Que pasará con Abraham? ¿Que harán estos dos peligrosos? ¬¬

Espero que os guste muchísimo. Besitos a todas las Rossers, R5ers y R5Family que leéis esta nove y la hacéis posible. 

Comentad abajo que quiero conoceros un poco más. Por ejemplo de donde sois y la edad que tenéis y todo eso ;) Si queréis saber algo de mi solo tenéis que preguntar. xD

R5er 4ever!